EL TREN DE LAS POMPAS DE JABON
Muffy, Thussy y Lena,son tres gatitos. Lena de pelo blanco y suave y Muffy y
Thussy son hermanos gemelos de color marrón clarito con manchas de color oscuras cerca de los ojos, que
les daba un aspecto muy gracioso. Su deseo, llegar algún día ¡“Al tren de pompas de jabón”!...
Ruffy era un gatito negro y
tímido y seguía a los gatitos. Se escondía por los callejones, pensaba que lo rechazarían,
por su color. igos Los gatitos vagabundeaban en las callejuelas más oscuras, haciendo travesuras y revolviendo
las basuras, y encontrar suculentas comidas.
Lena, dijo un día a sus amigos:
— ¡¿Por qué no vamos a
buscar el “tren de las pompas de jabón”?!
— Debe estar muy lejos… y
nos podemos perder…” —dijo Muffy.
Lena, no insistió, y
siguieron jugando, correteando y a las noches
acudían al parque a dormir entre los arbustos. .
Se despertaban muy temprano,
antes de que llegara el barrendero. Los niños siempre olvidaban
algún bocadillo en el parque y por suerte hoy alcanzaron a ver uno y se abalanzaron sobre el para comerlo. Cuando estaban tan a gusto, asomó Ruffy entre los arbustos. Estaba
hambriento, tampoco había comido nada por la noche en el callejón.
Le dio pena a Lena y dijo a
sus amigos:
— Compartiremos la comida
con Ruffy ¡Es mucho para nosotros solos!
— ¡Ruffy…!,— le gritó Lena—
acércate… y comerás con nosotros…
Lentamente Ruffy dio unos
pasos hasta llegar al lugar donde los tres amigos devoraban el bocadillo. Le
hicieron sitio y empezó a comer, aunque al menor ruido se asustaba. Llegó el
jardinero del parque y con el ruido que armó con sus palas asustó a Ruffy y salió
corriendo despavorido.
Pasaron el verano
divirtiéndose, y se acercaba el otoño. El tiempo se volvió más fresco.. Un
día que no encontraron comida tristes y con hambre, los tres
amigos se reunieron en su callejón favorito y se sentaron en los cubos de
basura a quejarse de su mala suerte. Entonces Lena pensó que era el momento
oportuno de convencerles para ir de viaje en busca “del tren de las pompas de
jabón”.
Aceptaron la
proposición de Lena, irían en busca del tren de las pompas de jabón , tendrían comida y estarían
felices y calentitos en el tren.
Ruffy, escondido , les escuchaba atento y decidió seguirles”.
Atravesaron montañas nevadas
y pasaron frío. Lena se volvió a mirar
para ver lo andado y su sorpresa fue cuando vió que Ruffy les seguía a distancia y estaba todo
mojado.
— Chicos..., nos sigue Ruffy y
si no le ayudamos morirá de frío —les comentó Lena.
Los tres amigos lo esperaron
y al llegar la noche decidieron juntarse para dormir entre unas rocas. Se pegaron unos
contra otros, para darse calor y su piel les sirvió de abrigo. Al amanecer cruzaron un río, encaramados en un madero que les trasladó a la otra orilla sin apenas mojarse.
¡A los gatos no les gusta
nada… nada… el agua!....
Llegaron a
un valle… ¡Descubrieron las vías del tren ocultas por las yerbajos del valle!
Los cuatro amigos se
pusieron a aplaudir de contentos. Las vías le llevarían hasta el tren. ¡Las
vías eran mágicas: de día desaparecían y las tenían que seguir de noche!
Estaban contentos y no les
importaba el cansancio y el hambre que empezaban a sentir, las provisiones se
iban gastando y si no llegaban pronto tendrían serios problemas. Seguirían
hasta conducirles a la estación “del tren”.
Una noche agazapados entre
las altas yerbas vieron a una ardilla que se metía en el agujero de un árbol y
llevaba frutos en sus manos.
Muffy, preocupado por sus
compañeros les dijo:
— Debemos pedir ayuda a la
ardilla o no llegaremos al tren.
— Si nos ve a los cuatro
juntos se asustará, mejor que te acerques tú y le pidas ayuda —contestó Lena.
— Vale, —dijo Muffy, que era
el más valiente— me acercaré al árbol.
Salió Muffy de entre la
yerbas y los demás se quedaron agazapados esperando que volviera su amigo con
algo de comida.
La ardilla se asustó al ver
al gato. Muffy se tumbó boca arriba para que viera que no era peligroso.
— Mis amigos y yo queremos
llegar al tren de pompas de jabón, pero nos hemos quedado sin comida —le contó
Muffy a la ardilla.
— Yo estoy recolectando
comida para el invierno, os daré con mucho gusto una parte —contestó la ardilla
—. La estación ya está cerca. Seguid las vías y os llevarán a ella.
Gracias por tu ayuda— le
contestó Muffy. Tomó unos frutos y se encaminó al lugar donde le esperaban sus amigos.
Saborearon las bellotas tranquilos y
siguieron las vías. Como estaba muy oscura la noche, Lena metió la patita en un
agujero y se la torció.
Ay…ay… —maullaba Lena de
dolor— No puedo seguir con vosotros.
Los amigos se
entristecieron, no podían dejarla allí.
Ruffy les estaba muy
agradecido y quería ayudar. .
—Yo soy un poco más grande
que vosotros y la puedo llevar en mi lomo —dijo.
— Gracias Ruffy —contestó
Lena aceptando su ayuda.
Así, arreglado el problema,
siguieron por las vías, que ya faltaba menos como les predijo la ardilla.
De madrugada se durmieron bien arrimaditos los cuatro amigos.
Al despertar captaron
un gran murmullo de maullidos, la estación
debía de estar cerca. la tapaba un pequeño monticulo.
¡Habían encontrado la
estación de tren de pompas de jabón!!!...
A Lena le había mejorado la patita y apenas le
dolía. Ruffy cuidadosamente la dejó
en el suelo y empezó a caminar.
En la estación esperaban “Al
tren” muchos… muchos gatitos… de todos
los colores…, grises, marrones oscuros, blanco y negros y, como ellos, todos
cantando y alegres…
Chuuu… Chuuu… Llegó el tren echando pompas de jabón
y se amontonaron, todos los gatitos querían
subirse. Los vigilantes del tren pusieron orden y les hicieron subir de uno en
uno.
En los vagones les surtían
de una bolsa con comida y unos tubos jabonosos para hacer pompas de jabón de
todos los colores.
Se sentaron en los vagones y
se prepararon para lanzar al cielo las pompas de jabón. Recorrerían todo el
mundo y con las pompas jabonosas limpiarían el cielo para que se pudiera ver siempre
de color azul.
Todos los gatitos contentos
hacían volar las pompas de jabón y el “tren” fue desapareciendo dejando una
estela de colorido tras de sí lleno de “las pompas de jabón”…………….. chuuu..
chuuuu…
¡¡¡El tren de las pompas de
jabón partió, lleno de gatitos alegres
y contentos para llenar el mundo de color!!!...
Violeta una niña preciosa , le gustaba jugar en la calle después del cole, mamá le llamaba ---___Violeta,Violetaaa... ara subir para cenar.
